Entre sus características físicas, destaca su cáscara delgada y lisa de color amarillo o anaranjado, con puntos color café; mientras que su pulpa, es carnosa, dura y de sabor ácido, según su grado de maduración.
Del náhuatl texocotl, que significa cosa dura, el tejocote pertenece a la familia de las rosáceas, y se cultiva desde San Luis Potosí hasta Jalisco y de Veracruz a Chiapas, aunque es considerado de adaptación sencilla con tolerancia a una gran diversidad de suelos y climas de poca humedad.
También conocido como manzanita y manzana de indias, el tejocote se cosecha a partir de agosto y los meses con mayor consumo son noviembre y diciembre. Los productos destacados que se obtienen de su procesamiento son algunos licores regionales, dulces típicos, jaleas, mermeladas y conservas. Se recomienda disfrutar de este pequeño fruto en sus distintas variedades, ya que aporta calcio, que fortalece huesos y dientes; hierro; vitaminas C y del complejo B, indispensables para el buen funcionamiento del sistema nervioso y el cuidado de piel, uñas y cabello.
Por si fuera poco, las raíces y hojas de este árbol se emplean como remedios medicinales contra el malestar de la garganta o la tos.
Protagonista en el ponche decembrino
Se acercan las posadas y, con ello, un sinfín de platillos imprescindibles para festejarlas. Para el frío se prescribe el ponche, una bebida caliente y agridulce cargada de una mezcla de sabores frutales aderezados con canela y piloncillo. Además de cañas, tamarindo, flor de Jamaica, guayaba, ciruela y manzana, uno de los ingredientes base es el tejocote.
Esta preparación mexicana se consumía desde la época de la conquista española, periodo en el que se hacían infusiones de frutas y se les añadía brandy, ron o aguardiente, lo que hoy conocemos como “ponche con piquete”. Actualmente se elabora la infusión –de las frutas ya mencionadas– y se sirve en jarritos de barro mientras se celebran procesiones, cantos y romerías.
No lo hagas a un lado
Cuando tomes ponche, no pongas las frutas a un lado; es importante que aproveches los nutrimentos y fibra que proveen. Además, es un producto mexicano muy valioso y sin igual.
Así que, ya lo sabes: a la próxima no le hagas el feo al tejocote, una fruta por excelencia de esta temporada decembrina.
Fuentes
- http://www.unamiradaalaciencia.unam.mx/download/pdf_prensa/unamirada_236.pdf
- https://www.gob.mx/siap/articulos/el-tejocote-fruto-de-temporada-con-gran-valor-nutricional
- http://www.tejocotes.com/
Fotografía