Historia (breve) del lavavajillas
¿Te imaginas que los ayudantes de tu cocina te rompan tus platos importados de China? Si no es tu caso, si era el de Josephine Cochrane… la nieta de John Fitch, el inventor del barco de vapor. Esta joven mujer no se preocupaba por lavar los trastes sino por las siguientes aportaciones que haría al mundo, tal como su abuelo.
Al casarse con un rico comerciante y miembro de la alta sociedad, se esperaba que Josephine organizara fiestas con frecuencia. Sin embargo, para transportar esa magia a la mesa había que ensuciar bastantes platos.
El personal doméstico a menudo astillaba su delicada vajilla de porcelana, acción que la llevó a lavarla por ella misma. Al poco tiempo, y después de varios platos rotos, se dio cuenta de que no era tan sencillo como creía. Fue ese momento en que Josephine decidió diseñar y construir una máquina que pudiera lavar los platos de manera más delicada.
El lavavajillas que ella inventó fue el primer modelo ideal para la comercialización. Dicho modelo consistía en compartimientos con una medida para cada elemento de la vajilla. La magia estaba en una rueda debajo de éstos, que giraba gracias a un motor que lanzaba un chorro de agua caliente y jabón. A los pocos días de presentarlo en el Exposición Mundial de Chicago de 1893, la inventora tuvo un sinfín de solicitudes de restaurantes y hoteles que querían un lavavajillas en su negocio.
¿Qué pasa dentro del lavavajilla?
El famoso lavavajillas es una máquina con un motor eléctrico utilizado para lavar platos, ollas, copas, así como otros utensilios de cocina. Su funcionamiento es sencillo, pues mientra funciona bañan a los enseres de cocina con una ducha de agua caliente.
Miles de modelos llenaron el mercado, pero cada uno con grandes particularidades. Los lavavajillas QuadWashTM de LG hacen brillar los platos ya que tienen ciclos de vapor que les dan un toque espectacular. Además, gracias al motor Inverter DD su funcionamiento es silencioso y te permitirá descansar mientras hace todo el trabajo pesado.
Por si no fuera poco los lavavajillas de LG, ahorran energía y agua, con el fin de que el impacto ambiental en su uso sea menor. Lo mejor es cuando estos electrodomésticos se conectan con tu celular, por medio de LGThinQ para controlar tu equipo desde donde estés o avisarte si detecta un problema interno o requiere una limpieza automática.
Los lavavajillas son el claro ejemplo de cómo la solución, que evolucionó en comodidad, vino de un sencillo problema: las grandes columnas de platos importados, sucios y astillados.
Por Miguel Guzmán