¿Qué es la sal rosa del Himalaya?
Es un mineral se extrae en Pakistán en donde se encuentra en una de las minas más grandes de Asia, en la mina de Khewra (y no en Himalaya). Esta mina con una edad aproximada de 225 millones de años procede de una halita, un mineral sedimentario que se forma cuando el agua de mar se evapora.
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En los últimos años, este mineral ha tenido un gran auge, al punto de que su precio sea mayor. Por otra parte, también se le han atribuido beneficios al consumirlo, como la mejora a la digestión, el alivio a los problemas respiratorios y hasta el buen descanso. Sin embargo, beneficios que distan de la realidad.
¿Cuáles son las ventajas de la sal rosa?
Mientras la sal rosa del Himalaya está compuesta por un 98% de cloruro de sodio, la sal común cuenta con el 99% de este químico. Por lo tanto, la sal rosa del Himalaya tiene los mismos beneficios que la sal regular. O sea, potencializa el sabor de los alimentos, ayuda a controlar la presión arterial y regula el pH del organismo, entre otros.
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Como se decía arriba, la diferencia entre la sal común y la llamada del Himalaya está en el 2%. Este refleja la presencia de otros minerales como el hierro (que le da el color rosa), el magnesio, el calcio y otros 81 minerales más. La sal rosa del Himalaya es una sal que no se refina ni pasa por un proceso de purificación, como es el caso de la sal común. Aunque su contenido de minerales sea original, no es significativo para considerar que trae beneficios extra al organismo.
Desventajas de consumir la sal del Himalaya
Hay que considerar que, por su composición, es necesario regular su consumo, pues el exceso de sal ocasiona problemas de salud como hipertensión arterial, insuficiencia renal y osteoporosis. Para evitar estos problemas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) invita a no sobrepasar la ingesta de 5 gramos diarios, pues consumir más puede traer efectos perjudiciales a la salud.
Otra desventaja es el elevado precio. El auge que tienen las redes sociales sobre la sal rosa hace que su demanda sea alta y a su vez su precio incremente. En otras palabras, el kilo de esta sal ronda entre los 60 y 90 pesos mexicanos, cuando la sal de mesa suele tener un precio promedio de 12 pesos por kilo.
También, el consumo de esta sal podría acarrear deficiencias en el consumo de otros minerales como el yodo, cuyo padecimiento incluye el bocio y problemas en el sistema nervioso central en niños. Tal vez, por esa razón en México, la Norma Oficial Mexicana no cataloga a la sal rosa como sal y pide que en su etiquetado se le denomine como condimento.
No se quien necesite saber esto, pero el exceso de sales de Himalaya en supermercados se está convirtiendo en un problema de salud pública. Por favor, lean.
— Mauricio Gonzalez MD. (@DrMauricioGon) November 7, 2021
Así queda claro, no hay diferencia entre la sal común y la del Himalaya, y consumir cualquiera de las dos en exceso puede ser dañino a la salud. El resumen: aunque la sal se vista de rosa, mona se queda.
Por Miguel Guzmán
Fuentes consultadas:
“Reducir el consumo de sal”, Organización Mundial de la Salud, (01/03/22)
Agencia, “Sal: propiedades, beneficios y valor nutricional”, La Vanguardia, (28/02/22)
Buenavida, “Las mentiras de la sal rosa de moda”, El País, (28/02/22)