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Resultados de la búsqueda: Nabo
Caldo de olla
- Diccionario: Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana
Caldo de trozos de carne de res con hueso, ejotes, elote, col, nabo, yuca, plátano macho rebanado con cáscara y papas. Se adereza con jitomate, cebolla, ajo y un ramo de hierbas de olor que contiene hierbabuena, xonacates, perejil y cilantro.
Bote
- Diccionario: Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana
Puchero que por lo general incluye carne de cerdo, res y pollo, y a veces cola de res y tocino, verduras como calabacita, papa, zanahoria, chícharo, chayote, elote y col; se condimenta con chile pasilla, canela, comino, anís, pimienta, laurel, tomillo, mejorana, orégano y pulque. Es un guiso festivo tradicional de Jalisco.
En Tepatitlán, el día de san Lorenzo los campesinos se reúnen desde muy temprano para encender el fuego e iniciar la cocción de todos los ingredientes en un bote; suelen servirlo en tazones grandes con cilantro y cebolla picados, y chile de árbol seco y molido, acompañado de tortillas de maíz y tequila o cerveza. De forma similar se prepara en las fiestas patronales de Cocula, El Grullo, Tuxpan, Tala y San Juan de los Lagos.
En Sayula se cita a Herculano Anguiano Bobadilla como creador de este guiso, a raíz de que cuando agasajaba a sus invitados, lo elaboraba en un bote alcoholero, con carne maciza de borrego, res, espinazo de res, gallina entera, pierna y espinazo de cerdo. Lleva salsa de jitomate licuado, tomatillo verde, cebolla, y verduras como calabacitas, zanahorias, chayote, elotes y chiles verdes serranos. Se condimenta con laurel, pimienta negra, orégano, mejorana y albahaca, y al final de la cocción se agregan chiles jalapeños, vino tinto y pulque.
En lugares como Ixtlahuacán del Río, el bote puede ser una especie de caldo de frijol con gallina, patitas y huesos de pierna de cerdo, zanahoria, nabo, poro, calabaza, ejote, col, cebolla y ajo; todo se deja cocer hasta que las carnes estén suaves y el caldo algo espeso. También en Michoacán se elabora de forma similar con varias carnes y verduras.
Bote de río
- Diccionario: Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana
Guiso similar al bote en el que las carnes que se utilizan son gallina, patitas y huesos de cerdo envueltas en una manta. Al caldo también se le agregan frijoles, ejotes, nabos, poros, zanahorias, calabacitas, ajo, cebollas y col. Es típico de Jalisco.
Asado de puerco
- Diccionario: Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana
Guiso similar al asado de res que se prepara con caldillo de jitomate y verduras. Puede hacerse de alguna parte específica del animal, como el lomo o la pierna. En Chihuahua se prepara con espinazo en trozos cocido en agua con piloncillo, orégano, laurel, tomillo, mejorana, cebolla y ajo, sazonado con chile colorado molido, canela y clavo. Se hace de forma similar en Durango, Coahuila y Nuevo León, aunque a veces se utiliza chile ancho. Es tradicional prepararlo el 25 de diciembre.
En Coahuila y Nuevo León se acostumbra para las comidas diarias, pero también se sirve como parte del menú de las tornabodas y otras festividades. Los guisos son similares a los de otros estados; la salsa en que se cocina el cerdo puede incluir chile ancho y cascabel, orégano, tomillo, mejorana, laurel, hojas de aguacate, jugo de naranja, ajo y a veces chocolate. En estos estados se tiene registro de que antiguamente el guiso se ponía en ollas de barro, se tapaba y se colocaba bajo tierra para conservarlo en buen estado hasta por seis meses.
En la parte oeste de Tamaulipas es similar al de Coahuila y Nuevo León; hacia la costa y el sur del estado puede ser un guiso de carne de cerdo con chile guajillo o cascabel, ajo, comino y vinagre. En San Luis Potosí puede ser un guiso similar al de sus estados vecinos, o bien un guiso cotidiano de la comida del mediodía, hecho de carne de cerdo preparada en chile ancho, ajo y orégano.
Verduras
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Plantas cultivadas y utilizadas para la alimentación, sea cual sea su parte consumida:
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– fruto: berenjena, calabacita, pimiento, jitomate.
– semilla: haba, frijol, chícharo.
– inflorescencia: alcachofa, coliflor, brócoli.
– hoja: col, espinaca, lechuga, achicoria, acedera.
– tallo: espárrago, tallo de lúpulo.
– bulbo: hinojo, cebolla.
– tubérculo: ñame, papa, camote.
– raíz: zanahoria, nabo.
Las hortalizas (verduras cultivadas en huertos) son de una importancia considerable en la alimentación. En primer lugar en el terreno nutricional, porque contienen glúcidos, prótidos vegetales, sales minerales, fibra y vitaminas, diferentes de los presentes en los productos de origen animal, repartidos de formas diversas pero siempre muy asimilables y porque facilitan el tránsito intestinal. A nivel gastronómico aportan aromas y sabores específicos. En la cocina permiten una gran diversidad de preparaciones: conservas, guarniciones simples o compuestas, entremeses, sopas, purés, cremas, etc.
Las verduras desempeñan un gran papel en el equilibrio alimentario y nutricional. Las verduras, ricas en potasio y otros minerales, así como en provitamina A y vitaminas (B1, B2, B3 y C), intervienen en la mayoría de las reacciones químicas del organismo. Las verduras frescas se consumen crudas o cocidas, al natural, aderezadas, con o sin materias grasas.
Las cocciones a la inglesa (directamente en agua) hacen que pierdan una parte de sus sustancias útiles solubles (sales minerales y vitaminas hidrosolubles); la pérdida es menor cuando se cocinan salteadas o al vapor.
A menudo se emplean como guarnición de una carne o un pescado, pero también pueden constituir platos por sí solas: sopas, ensaladas, escabeches, gratenes, tartas, etc. Quesos, huevos, mantequilla o salsas permiten ligarlas o realzar el sabor cuando son un poco insípidas.
Las verduras pueden conservarse varios días (preferentemente envueltas si tienen un olor fuerte) en la parte baja del refrigerador sin perder sus cualidades nutricionales. Las verduras congeladas tienen la ventaja de estar disponibles todo el año y son excelentes desde el punto de vista nutricional.
Gracias a los progresos de la conservación y del acondicionamiento, así como a las importaciones, en muchos lugares del mundo se pueden encontrar verduras extranjeras que a menudo se comercializan todo el año. Sin embargo desde el punto de vista del sabor, las verduras de temporada y locales siempre son mejores.
Tornear
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Modelar un elemento con la ayuda de un cuchillo de cocina para darle una forma determinada y regular. Los elementos torneados del mismo modo se cuecen de manera uniforme. Las papas se tornean en bolas, en aceitunas o en vainas, según la preparación. Las zanahorias y los nabos se tornean para una bouquetière, del mismo modo que se tornean la pulpa de pepino, los sombreros de los champiñones, las aceitunas deshuesadas, etc.
Tié bou diéné
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Plato nacional senegalés, elaborado con trozos o rodajas de pescado blanco (barbudo gigante, congrio, dorada o merluza), a veces rellenos de cebolla picada con perejil y pimiento. Dorados en aceite de cacahuate, los trozos de pescado se ponen a cocer a fuego lento sobre un lecho de verduras (berenjena, col cortada fina, nabo, cebolla, camote, jitomate), previamente salteados en aceite y luego realzados con pimiento picante, pimienta y, si se desea, tamarindo, y a los que se añade pescado seco y en ocasiones un molusco marino específico, el “jète”. El tié bou diéné se sirve con arroz cocido al vapor y se acompaña con la salsa de la cocción, servida aparte.
Scotch broth
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Cocido escocés, llamado también barley broth (sopa de cebada). Se compone de paletilla de cordero, cebada y distintas verduras (zanahoria, nabo, cebolla, poro, apio, a veces chícharos y col). Se sirve con perejil. Se puede presentar: en primer lugar el caldo, sin colar, y luego la carne, con una salsa de alcaparras.
Sal
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Sustancia cristalizada, friable e inodora, de sabor punzante, empleada como condimento y como agente de conservación. Compuesta por cloruro de sodio en estado puro, la sal es muy abundante en la naturaleza. Se distingue la sal marina, extraída del agua de mar por evaporación (30 kg por metro cúbico), y la sal gema, que existe en estado cristalino en la tierra.
La sal, indispensable para el organismo, contribuye a mantener la presión osmótica de las células. Las necesidades del organismo humano son de alrededor de 5 g de sal por día, pero la alimentación, muy rica en los países occidentales, las cubre ampliamente, a veces de forma excesiva (hasta 20 g), lo que puede propiciar problemas graves de salud.
La sal, condimento alimentario indispensable, sigue siendo hoy en día una materia prima esencial de las industrias agroalimentarias (conservas en lata, salazones, pescados salados, elaboraciones de charcutería, quesería, etc.).
La sal se presenta en tres formas:
– Sal de cocina. En cristales pequeños. Sirve para salar los manjares durante la cocción. Debe permanecer al alcance de la mano en una caja con tapa, que la preserva de la humedad.
– Sal fina. Llamada también “sal de mesa”, siempre refinada. Se utiliza como condimento de mesa, en un salero, en pastelería, para los sazonamientos y para el acabado de salsas. Para que no se humidifique en exceso se le añaden distintos productos (carbonato de magnesio, silicoaluminato de sodio, etc.), cuya proporción nunca debe exceder el 2%.
Cuando se trata de “sal marina”, en el envase siempre se debe indicar su origen. La “flor de sal” es la primera cristalización, muy fina, que aparece en la superficie de las salinas tradicionales. Es recogida manualmente por los salineros de diferentes costas alrededor del mundo. También encontramos flor de sal aromatizada: con especias tostadas, pimiento de Espelette, cortezas de limón, etc.
– Sal gruesa. Refinada o no, se emplea en la industria y para ciertas preparaciones (res con sal gruesa, verduras que se deben purgar, cocción de un ave con sal gruesa a la cazuela). En la sal refinada se han eliminado las materias terrosas y sales delicuescentes (sal de potasio y sal de magnesio), mediante disolución en agua y posterior evaporación. La sal no refinada, de color gris, es más rica, por lo que resulta muy adecuada para la cocina, así como para la cocción en costra de sal de ciertos pescados (de escamas grandes), aves, verduras, etc. El alimento, encerrado en un cascarón hecho a medida, se cuece en su propio jugo y de este modo conserva todo su sabor.
Los alimentos más ricos en sal son los quesos, los postres industriales, la caza, la charcutería, la carne ahumada y los pescados en salmuera. La función esencial de la sal es realzar y potenciar el sabor de los alimentos y excitar el apetito. Ciertas sales se destinan a empleos particulares:
– La sal de apio, sal fina mezclada con apio-nabo seco y pulverizado, sirve para condimentar el jugo de tomate en cóctel y otros jugos de verduras, e incluso para realzar fondos de cocción y consomés.
– La sal de levístico, sal fina aromatizada con la raíz de esta planta aromática, seca y pulverizada, más intensa que la sal de apio, se emplea en las sopas y salsas, en particular en Alemania.
– La sal especiada, mezcla realizada sobre la base de 2 kg de sal fina, 200 g de pimienta blanca molida y 200 g de diversas especias, permite condimentar farsas, patés y terrinas.
– Existe una sal ordinaria a la que se le añade un 2 o 3% de papaína (enzima extraído de la papaya que favorece la degradación de las proteínas), destinada a que las carnes sean más tiernas y reservada para uso doméstico.
– La sal de mesa yodada es una sal fina a la que se le añade yoduro de sodio. Su uso, recomendado, entre otras instituciones, por la Unicef, puede paliar las carencias de yodo (que supone una disfunción de la glándula tiroides).
– La sal de régimen es un sucedáneo parcial o sin nada de desprovisto de cloruro de sodio.
– La sal nitrada es un conservante utilizado en charcutería y en conservería. La sal de nitrito es una sal a la que se ha añadido una mezcla de nitrato de sodio y de potasio y de nitrito de sodio (10% como máximo).
– La sal de hickory (nogal americano), condimento estadounidense, es una mezcla de sal marina y de serrín de hickory ahumado, pulverizado. Posee un ligero sabor a avellana y se emplea en la cocina de barbacoa.
Existen otras sales de procedencias diversas: sal inglesa de Maldon, sal negra o roja de Hawai, sal ahumada de Noruega, sal rosa de Perú, etc. La sal rosa del Himalaya procede de canteras de este macizo montañoso o de los mares que se secaron hace 200 millones de años. El color rosa claro natural de sus finos cristales es debido a su contenido en hierro.
Se llama sal china al glutamato de sodio y sal de pescado al nuoc-mâm.
Rémoulade
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Salsa fría derivada de la mayonesa mediante la adición de mostaza, pepinillos, alcaparras y hierbas aromáticas picadas, acabada en ocasiones con un poco de esencia de anchoas. A veces se le añade huevo duro picado. Cuando acompaña a carnes, pescados y crustáceos fríos, se trata de una simple mayonesa con mostaza y realzada con ajo y pimienta. La salsa rémoulade condimenta tradicionalmente el apio-nabo rallado y distintas ensaladas compuestas.
Rebanar
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Cortar en lonchas, láminas o rodajas más o menos finas pero de igual grosor verduras, frutas, carne o embutidos. La operación se realiza con un cuchillo sobre una tabla de corte (pepino, poro, hongos, cebolla, pera, manzana), pero también con la mandolina (zanahoria, nabo, papa, betabel) o con un procesador de alimentos multiusos, equipado del disco específico (papa, zanahoria, col).
En restauración existe un instrumento especial para cortar los jitomates en rodajas de 5 mm de grosor sin aplastarlos, o cortarlos “en abanico” (las rodajas permanecen unidas por la base). Similares a éste existen rebanadores de aguacate, de huevos cocidos y de quesos, que permiten cortar rodajas o rebanadas delgadas del mismo grosor que conservan su forma, es decir, el alimento no se desmorona ni se aplasta.
Las rebanadoras industriales permiten cortar de manera segura y sencilla grandes piezas de carne, jamones, embutidos y barras de queso.
Rabo o cola
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
- Terminación de la columna vertebral de los bovinos.
El rabo de la res proporciona sabrosas preparaciones: es ideal para caldos, sopas, potajes y cocidos para darles más sabor y más cuerpo; guisado con salsa picante; breseado y servido con una guarnición de zanahorias y cebollas glaseadas, o con bolas de col verde rellenas y breseadas, zanahorias y nabos torneados y glaseados y papas a la inglesa; o bien hervido y luego empanizado y asado, acompañado con una salsa de mostaza y pepinillo.
El rabo de ternera completa las carnes de cocido o aromatiza una sopa de verduras.
El rabo de cerdo recibe las mismas preparaciones que las patitas de cerdo: empanizado y asado, en escabeche y también se trata en salmuera.
El rabo de cordero no se emplea mucho en cocina, y se suele asar con el gigot.
- Apéndice caudal de ciertos crustáceos, y a menudo representa su única parte comestible, una vez peladas: colas de camarón, de cangrejo de río, de langosta.