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Resultados de la búsqueda: Tlapique
Renacuajo
- Diccionario: Diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana
Larva o cría de la rana. Se acostumbra en México desde tiempos prehispánicos en pilte y mextlapique. La costumbre de su consumo, igual que el de la rana, casi ha desaparecido. En Tulancingo, Hidalgo, los preparan fritos con cebolla, chile verde y epazote. En los mercados se pueden encontrar asados, envueltos en hojas de maíz. En algunos lugares también los preparan en mixiote. En cualquiera de las preparaciones mencionadas pueden cocinarse solos o mezclados con acociles o charales (se usaban también ajolotes, pero hoy están prohibidos porque están en peligro de extinción). Los chinantecos de La Esperanza, Santiago Comaltepec, Oaxaca, lo acostumbran comer en forma de pilte durante marzo, abril y mayo.
Rana
- Diccionario: El pequeño Larousse Gastronomique en español
Batracio de aguas dulces, del que se consumen las ancas. Viven en aguas corrientes y estancadas, en bosques húmedos hasta casi desérticos y semiáridos. En general estos batracios tienen lomo verde con manchas negras; su piel es lisa, húmeda y casi desprovista de las acumulaciones de glándulas tan comunes en los sapos. Su larva, llamada renacuajo, también es comestible y tiene varios usos gastronómicos.
En Francia es muy popular el consumo de ancas de rana, se consumen dos tipos: la rana verde, que es la más sabrosa, y la roja. Su carne es blanca, delicada y de fácil digestión, pues contiene poca grasa, aunque un tanto insípida. Como tiene un ligero olor a humedad, antes de prepararse se marina en leche por una hora, o en agua con jugo de limón por 10 min.
En Europa, las ancas de rana a menudo se venden ultracongeladas, y en la mayor parte de los casos ya se pueden cocinar. Se preparan en blanqueta, a la crema, con finas hierbas, en sopa, en omelette, en muselina, pero también pueden freírse o saltearse, con ajo o con ajo y perejil.
En México, su consumo fue muy importante en la época prehispánica, los habitantes del Valle de México la consumían ampliamente en muchas preparaciones, como en tamales y mextlapiques. Actualmente no existe gran demanda pero se siguen comercializando en algunas regiones. Se preparan en salsa verde, al mojo de ajo, empanizadas, en pipianes, capeadas, a las brasas, en caldillos o diferentes salsas. Se considera principalmente botana o entremés.