El jarabe de este postre tiene un sabor más delicado que la acostumbrada azúcar caramelizada.
Procedimiento
Precaliente el horno a 170 °C.
Caliente la leche, la cáscara de naranja y la vainilla en una cacerola a fuego medio. Retire del fuego cuando hierva.
En un sartén integre 1 taza de azúcar con el jugo de naranja. Caliente a fuego alto y revuelva hasta que el azúcar se disuelva en el jugo. Deje de revolver y cocine aproximadamente 10 minutos, o hasta que la mezcla adquiera un color oscuro. Vierta un poco del caramelo en los moldes individuales y póngalos en la charola para hornear.
Bata los huevos, las yemas y la ½ taza restante de azúcar hasta que la mezcla tenga una textura cremosa. Cuele la leche tibia sobre la mezcla de huevo y azúcar, batiendo constantemente. Llene los moldes con esta mezcla.
Coloque los moldes en la charola para hornear y llénela con agua caliente hasta que llegue a la mitad de los moldes; hornee durante 50 minutos. Los flanes deben estar suaves y con consistencia poco firme en el centro, pero no líquidos. Refrigere durante 4 horas, o toda la noche.
Para servir pase un cuchillo alrededor de la orilla de cada molde y voltéelo en un plato para desmoldar el flan, decore con obleas de colores y una rebanada de jalea de frutas.
Información adicional
Nota
Acentúe el sabor de estos flanes bañándolos con un poco de rompope o licor de café.
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