¿Alguna vez has explorado la parte de tu casa en donde guardas vinos y licores, sólo para darte cuenta de que tienes guardada una botella de vino desde hace diez, quince o veinte años? Pues a John Brecher y Dorothy Gaiter, columnistas de vino en The Wall Street Journal, por ahí de 1998, les pasaba mucho. Por esta razón, decidieron empezar una tradición con más de 24 años de historia y que nos ofrece el pretexto perfecto para abrir esa botella.
El último sábado de febrero es la fecha que debes marcar en tu calendario para reunir a tus amigos e invitarlos a traer con ellos esa botella que les gustaría, por fin, disfrutar sin culpa durante la “Noche de abrir esa botella” (open that bottle night, en inglés).
El significado detrás de la “Noche de abrir esa botella”
La tradición se origina en Estados Unidos, país con una tradición de consumo de vino diferente a la mexicana; sin embargo, en nuestro país no es poco común encontrar botellas que fueron un regalo, recuerdo de un evento o, simplemente, demasiado valiosas como para descorcharlas un día cualquiera.
El significado de este evento es darle protagonismo a los recuerdos que el vino evoca: ya sea un ser querido que disfrutaba esa etiqueta o alguna etapa memorable de nuestras vidas.
El vino puede aún ser demasiado joven (si se trata de un vino pensado para tomarse 30 o 50 años después de producido), o ya ser muy viejo para disfrutarse; lo importante es evitar que siga juntando polvo sin que nadie experimente sus aromas y sabores.
Prepara buena comida, abre la botella y habla sobre los recuerdos que rodean el vino. El aspecto, el olor y el sabor de un vino pueden traer recuerdos de una manera que una etiqueta por sí sola no puede, así que deja que el vino haga su magia.
¿Cómo participar en esta celebración del vino?
Muy fácil: invita a tus amigos y diles que traigan una botella con las características que mencionamos antes. ¿Y si no la tienen? Las botellas nuevas también son bienvenidas, nada enriquece más una cata de vinos que la comparación entre regiones, varietales, estilos y añadas. Prepara tus platillos favoritos sin preocuparte mucho por el maridaje; después de todo, lo que esconden esas botellas es una sorpresa.
Te compartimos un formato de notas de cata que puedes imprimir y entregarles a tus invitados para comparar los aromas y sabores de cada vino descorchado. No olvides invitar a cada uno a compartir la historia de esa botella, así como el tiempo que la tuvieron guardada.
Compártenos tus fotos utilizando el hashtag #openthatbottlenight y etiquetando a Larousse Cocina.
Guarda e imprime esta imagen para anotar todas las características de los vinos que pruebes esta noche
¿Qué vinos es mejor evitar?
Si ya te armaste de valor para organizar esta celebración con tus seres queridos, seguramente te estarás preguntando qué vinos es mejor no abrir, si debes guardarlos un rato más o si, de plano, hay que desecharlos. La respuesta es: ninguno. Si bien hay vinos, como los blancos, que no suelen resistir añejamientos en botella superiores a los diez años, o como grandes vinos franceses que se diseñaron desde el viñedo para guardarse hasta por cien años y solamente mejorar con el tiempo; nadie aprende en cabeza ajena, así que lo mejor es probar y encontrar esos defectos por ti mismo.
La “Noche de abrir esa botella” es una celebración del vino en la que los recuerdos son protagonistas y que este año cumple 25 años de conmemorarse en el último sábado de cada febrero. Anímate a descorchar esos vinos y celebra la magia de esta bebida con tus seres queridos y, por supuesto, con nosotros.
Por Gonzalo G. Ehnis
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