Hoy en día existe una gran cantidad de documentación sobre los primeros recetarios de la humanidad; sobre la evolución de algunas prácticas antiguas relacionadas con la cocina; la alimentación y sobre el papel y la importancia de los cocineros en la sociedad.
¿Qué nos dice la tablilla babilónica?
En febrero de 2024, Irene Vallejo compartió un post en sus redes sociales en el que menciona una tablilla babilónica como el libro de cocina más antiguo y agrega que, además, esta tablilla incluye un pasaje conocido como “La cocina infernal” o “La cocina del infierno” en el que aparecen algunas recetas de broma. En su publicación, incluyó también una liga a Lapham’s Quaterly, una publicación estadounidense donde se habla un poco más a fondo de la tablilla y su contenido.
Gracias a este artículo, podemos ver que la tablilla en realidad es un conjunto de cuatro tablillas. La edad de tres de ellas (donde se encuentran las recetas y el pasaje de “La cocina infernal”) corresponde con el periodo paleobabilónico, es decir, con el Primer Imperio Babilónico, creado por Hammurabi (1792-1750 a. C.) y datan de alrededor del año 1730 a. C. La cuarta tablilla, data de alrededor de mil años después, lo que sitúa su elaboración en el periodo del Imperio Neobabilónico.
Detalle de una de las tabillas babilónicas
De acuerdo con Ashley Winchester (y Pável Ramírez en español), además de permitirnos conocer la existencia de estas recetas y bromas, esta información ha servido para obtener nuevas pistas sobre la escritura cuneiforme y sobre la lengua que se utilizaba en aquel entonces. Esto se debe a que un grupo de estudiosos y especialistas en disciplinas diversas de la Universidad de Yale, que trabajan con la Colección Babilónica de la misma universidad, han dedicado sus esfuerzos tanto a comprender y traducir las tablillas como a recrear las recetas que registraron en ellas.
Por supuesto, estos esfuerzos se han encontrado con algunas dificultades por las cuales nunca —incluso siguiendo las recetas al pie de la letra— podremos degustar las recetas encontradas en las tablillas del mismo modo y con el mismo sabor con que se consumían en aquel periodo. La más grande, quizás sea que el gusto es una construcción cultural que depende de muchos factores.
Así, incluso cuando se conocen los usos actuales de la gastronomía en esta región, resulta imposible comprobar qué tanto han cambiado de ese periodo a la fecha. Al mismo tiempo, hay límites sobre cuánto toleramos algunos ingredientes, como la sal o el ajo, pero no podemos tener la certeza y en qué cantidades se usaba entonces.
¿Qué recetas se registraron en las tablillas?
En una de las tres tablillas correspondientes con el periodo paleobabilónico, se cuentan veinticinco recetas de caldos y estofados con pocas indicaciones. En las dos restantes hay menos recetas, pero con indicaciones más detalladas. Entre estas se encuentran el caldo elamita llamado “Zukanda”, un estofado conocido como “Tuh’u”, un estofado de cordero llamado “mê puhādi” y un platillo vegetariano llamado “pašrūtum”.
Puedes consultar las recetas en el mismo artículo.
¿Cómo se ven estos platillos?
De acuerdo con Alfredo Álamo, “En 2018, un equipo de la Universidad de Yale convocó unas jornadas histórico-gastronómicas, en las que se cocinaron recetas de la Antigua Roma, de la Europa Medieval o la Antigua China. Como plato fuerte, decidieron acudir a las tabletas babilónicas para preparar tres de los platos cuyas recetas estaban mejor traducidas”. Estos platos fueron dos estofados de cordero y una receta vegetariana enriquecida con pan de cerveza.
Seguramente, como nosotros, te preguntarás cómo se ven estos platillos. Los mismo sucedió en la mente de Bill Sutherland, profesor de Biología de la Conservación de la Universidad de Cambridge. En 2020, Sutherland publicó un hilo en Twitter, ahora X, con fotografías y comentarios sobre su experiencia al preparar estos platillos.
¿Y las bromas?
En la publicación de Vallejo hay una traducción (me imagino que realizada por la misma autora) de tres de estas recetas:
- Comerás estiércol de asno sobre ajo amargo y paja.
- Comerás el huevo de un ganso del gallinero apoyado sobre un lecho de arena y una decocción de algas del Eúfrates.
- Comerás pan aún caliente y la nalga de un burro semental rellena de caca de perro y excrementos de moscas del polvo.
Fuera de estas recetas de broma, ¿probarías algunos de estos platillos?
Por Ulises Granados
Fuentes:
Álamo, Alfredo, “El libro de cocina más antiguo del mundo”, Lecturalia, (19/4/2024).
Guzmán, Miguel, “3 libros que marcaron la gastronomía”, Larousse Cocina, (19/4/2024).
Oliver, Mark, “Opciones culinarias para el hogar hoy en día: Tres recetas babilónicas de 1600 a.C.”, Ancient Origins, (19/4/2024).
VV.AA., “The Ancient Mesopotamian Tablet as Cookbook”, Lapham’s Quaterly, (19/4/2024).
TresB, “Un profesor prepara recetas de hace casi 4.000 años y explica en Twitter su sabor”, Yahoo! News, (19/4/2024).
Vallejo, Irene, “Este es el libro de cocina más antiguo de la humanidad” [post], Facebook, (19/4/2024).
Winchester, Ashley, “The world’s oldest-known recipes decoded”, BBC, (19/4/2024)