Contexto histórico
Como otro proyecto familiar es que arrancó en 2006 Viñedos de La Reina en Valle de Guadalupe y Valle de San Vicente; un sueño del arquitecto tijuanense Roberto Curiel y su esposa Socorro Amaya.
Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah son algunas de las primeras uvas que cubrieron sus viñedos en estos dos valles que conforman 50 hectáreas en conjunto y que ahora dirige Rubén Curiel como director general y en la enología está el chileno Héctor Villaseñor.
Oficialmente es que en 2009 produjeron sus primeras botellas y en 2011 se edificó su vinícola en el Valle de Guadalupe, para ese mismo año crecer al sur con Rancho La Lupita, donde tienen las cepas más resistentes al calor, como Nebbiolo, Cabernet Sauvignon, Syrah, Petit Verdot, Tannat, Sangiovese, Tempranillo, Malbec y Viognier.
Tanto en sus vinos jóvenes como en los de guarda hay un extremo cuidado gracias al equipo de campo y en bodega que logran producir entre 6 a 8 mil cajas anuales en sus líneas VR, Duquesa y Edición Especial.
Cuentan con sala de degustación y un restaurante llamado Salve Asador Campestre bajo la guía del chef Antonio Mortera, que aperturaron en 2017 y 2018, respectivamente.
Misión
La pasión por el vino y por la experiencia de quien lo bebe, y el compromiso de ofrecer con los mejores vinos bajacalifornianos el amor por la tierra y nuestro legado como familia.
Enólogo
Actualmente el enólogo es el chileno Héctor Villaseñor, quien entró al proyecto en 2013.
Premios
La primera medalla la lograron en 2014 en el San Francisco International Wine Competition ganando un doble oro con su Cabernet Sauvignon de esa misma añada; posteriormente surgieron reconocimientos en el Concours Mondial de Bruxelles y en el Concurso Internacional de Vinos Bacchus. Recientemente el Syrah 2019 obtuvo oro en el Concours Mondial de Bruxelles.
Información de interés general
Una de las características que tiene la bodega es que no usan bombeo, sino que todo es por gravedad, lo que provoca que el vino conserva ciertos aromas y sabores muy particulares.
