Contexto histórico
Pau Pijoan es un referente en la zona enológica de Baja California y de todo México. Fue pionero en la nueva ola creadora de vinos gracias a lo aprendido a finales de los años 90 en La Estación de Oficios del Porvenir, conocida como La Escuelita, un espacio fundado por el enólogo Hugo D’Acosta, enfocado en el aprendizaje de los oficios regionales relacionados con las uvas y las vides.
Este veterinario e investigador de raíces catalanas encaminó poco a poco su vida a la enología tras su paso por La Escuela, de la que fue segunda generación. El primer resultado de lo aprendido y experimentado surgió en 2002 con su vino Leonora, en honor a su esposa, que mezcla Cabernet Sauvignon y Merlot.
Con el tiempo aparecieron Silvana, Paula y Doménica, botellas dedicadas a los nombres de sus hijas, y algunas otras opciones como Julius y Mara.
Este enólogo resalta que las crisis personales lo impulsaron más al mundo del vino comenzando con un viñedo que tenía una pequeña casita y unos cuartitos que ahora son la bodega, y de donde salió otra de sus líneas, Convertible Rojo en la usaba la Ruby Cabernet, a la que tuvieron que añadir primero Petite Sirah para después cambiarla a Nebbiolo y otras uvas. “Este vino fue el reflejo de mi crisis de los 40, mi convertible rojo resultó este vino y la bodega misma”.
Convertible Rosa a partir de uva Zinfandel salió un poco después, etapa a la que Pijoan sumó un ejercicio más experimental con la etiqueta Collage. “Son experimentos que hacemos de acuerdo a lo que vemos que está mejor en la tierra”.
Pijoan es un gran ejemplo de cómo un proyecto familiar continúa gracias a la participación de la siguiente generación, pues las hijas de Pau están desde diversos puntos, por ejemplo, Silvana llevó la bodega hacia los vinos naturales, los cuales trabajan desde 2017 con el lanzamiento de Vino Pelón y El Carbónico que tiene co-fermentación espontánea en maceración carbónica, proceso de vinificación asociado a los vinos franceses de Beaujolais.
Silvana estudió para sommelier y se fue involucrando en la parte de producción de vinos naturales que creció a la par de los vinos convencionales de la bodega. Árbol de Fuego fue el primer vino que hizo esta joven para tener una línea personal, y que se complementa con La Piqueta, un subproducto que surgió desde época grecorromanas, muy popular en Francia, que es el orujo que no haya fermentado con las pieles, al que se añade agua y se fermenta con el azúcar que trae y luego se hace una segunda fermentación como si fuera espumoso en botella.
A la par nació una línea muy especial para los Pijoan enfocada en Vermut, un aperitivo hecho a mano a base Syrah proveniente del Valle de La Grulla al sur de Ensenada, Baja California, añejado por un año y fortificado con más de 15 extractos botánicos de plantas nativas de Baja California, de cultivo y cosecha propia a cargo de otra de las hijas, Paula, especialista en plantas nativas, opción que pasó por un método solera; y la Mistela, otro vermut de vino y mosto de Moscato Canelli, Sauvignon Blanc, Chenin Blanc, Zinfandel y Grenache.
En esta bodega y viñedo hay degustaciones con citas en las cuales puedes probar las líneas que crean Pau y Silvana, y tienen venta nacional a cargo de Doménica.
Misión
Para Pijoan sus vinos son el resultado del diálogo entre el viñedo y quienes los elaboran. Es una vinícola familiar con muy poca intervención en sus procesos enológicos. Su lema es: “Se hace lo que se dice, se dice lo que se hace”.
Países de exportación
Estados Unidos y Guatemala
Enólogo
El enólogo es Pau Pijoan, un veterinario y científico que encontró en La Escuelita la puerta para entrar a la enología. A la par su hija Paulina Pijoan fungió como la nueva generación de winemaker de la bodega, ella enfocada en los vinos naturales.
Información de interés general
El viñedo de Pijoan lleva casi dos décadas sin intervención química siguiendo principios orgánicos y biodinámicos (sin certificación) y lombricultura, a la par han generado un microsistema de plantas nativas de Baja California.
