Impulsan uso de estufas ecológicas

En México se estima que, en los hogares de 19 millones de personas, todavía se utiliza madera para cocinar. Lo anterior, pese a que se ha demostrado que la exposición doméstica al dióxido de carbono que ocasiona el humo de leña es causa de enfermedades crónicas, infecciones respiratorias, y en el peor de los casos, cáncer pulmonar.

Es por este motivo que un grupo de ecologistas y la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) emprendieron un proyecto para promover las estufas ahorradoras de leña, que, a pesar de la resistencia de las comunidades rurales a esta innovación, se ha expandido con rapidez por todo el país.

Beneficios

De acuerdo con el Programa Especial para la Seguridad Alimentaria (PESA) propuesto por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (por sus siglas en inglés, FAO), el uso de estas estufas se alinea con los objetivos de disminuir el consumo y la combustión de leña al mismo tiempo que se adapta a los usos y costumbres culinarias de muchas comunidades originarias. 

Entre los beneficios de las estufas ahorradoras de leña está que no permiten el paso del humo a la cocina, así se evitan enfermedades respiratorias y de los ojos, además de que los muebles y los utensilios de cocina se mantienen libres de tizne, por lo tanto el gasto de agua se reduce..

Su utilización representa un ahorro aproximado de 40% de la leña que se consume en un fogón abierto, lo que se traduce en una disminución en la tasa de deforestación local.   

Para su construcción, se necesitan materiales básicos, como tierra, arcilla, grava y arena, de preferencia cernida, para prolongar el tiempo de vida de la estufa; mientras que de materiales comerciales se necesita cemento, tubos para chimenea, una teja y una base metálica. Dichos materiales hacen que la construcción de esta estufa sea asequible.

Actualmente existen programas de asistencia para armarlas, pero también los hay de capacitación a la población en general, donde se explica a detalle cómo se fabrican y cómo se deben usar de acuerdo con los platillos tradicionales que consumen.

Funcionamiento

Para su construcción se hacen túneles con salidas para las hornillas (idealmente cuatro), con tamaños que correspondan a los utensilios que utilizan normalmente las cocineras de cada hogar. La hornilla que corresponde al comal para hacer tortillas es más grande que la que se utiliza para cocinar en una olla.

 

El final del túnel conecta con la salida a la chimenea a la que se le puede poner un filtro, ésta expulsa el humo del hogar a través de un tubo, y así,  evita que el humo se condense al interior de las viviendas.

Para evitar que se obstaculice el flujo del calor, es necesario retirar la ceniza todos los días con un cepillo y evitar derrames de agua, ya que, al ser una estufa construida con materiales que se disuelven con facilidad es posible que a largo plazo, sufra roturas o grietas.

Esquema de estufa ahorradora de leña.

Esquema de estufa ahorradora de leña.

Es importante enterarnos sobre los riesgos a la salud que implica seguir cocinando con leña, pero también mitigar nuestro consumo de recursos naturales. En estados como Oaxaca, Campeche, Yucatán y Chiapas el cambio fue bien recibido cuando supieron que su salud estaba en juego y poco a poco van adaptando sus costumbres culinarias al equipo.

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