Hidrate la tapioca en agua hirviendo durante 10 minutos. Mézclela con el resto de los ingredientes y reserve.
Masa y armado
Coloque sobre una superficie plana la harina en forma de volcán. Ponga en el centro la sal, el azúcar y los cubos de mantequilla. Con las yemas de los dedos incorpore poco a poco la harina con la mantequilla, desmenuzando la mezcla con las manos. Trate de trabajarla lo menos posible para que no se caliente en exceso, de lo contrario, será difícil extenderla.
Forme una bola con la masa. Con una espátula de plástico haga cortes en la masa para deshacer completamente la mantequilla. Vuelva a unir la masa sin amasarla, forme una bola, y refrigérela durante 30 minutos como mínimo.
Extienda la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada, hasta que obtenga un grosor de 2 centímetros. Acomode la masa sobre un molde para tarta o en varios moldes individuales, procurando que ésta salga ligeramente por los bordes del molde.
Pique la base de la tarta con la ayuda de un tenedor y déjela reposar en refrigeración durante 20 minutos.
Vierta el relleno dentro de la base de tarta y hornéela durante 20 minutos, o hasta que se doren las orillas. Retírela del horno y déjela enfriar completamente.
Sirva la tarta a temperatura ambiente.
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