Chapulines
Estos saltamontes viven en las milpas y en otros cultivos, como la alfalfa y el frijol. Su temporada de captura varía de acuerdo con el tamaño que se deseen: durante mayo e inicios de junio, se encontrarán chapulines muy pequeños y sin alas; a finales de junio y durante julio, tendrán un tamaño mediano, el cual es considerado por muchos como el mejor; durante agosto y septiembre, son muy grandes y con alas, momento en que su sabor es más fuerte. Su captura principalmente sucede en campos oaxaqueños y ésta se ha extendido a otros estados, como Puebla, Hidalgo, Guanajuato y Tlaxcala.
Son muy valorados como botana, para acompañar bebidas alcohólicas, hacer salsas o en preparaciones como quesadillas.
Escamoles
Son las larvas de la hormiga güijera, también llamada escamolera. Su temporada de recolección es durante marzo y abril. Dicho proceso resulta en una tarea ardua, porque la hormiga escamolera únicamente anida en lugares altos (regularmente cerros) para protegerse del agua. Los nidos se ubican entre magueyes y nopales o bajo árboles de pirul o mezquite. Los principales estados donde se recolectan son Tlaxcala e Hidalgo.
Su sabor tenue los hace ideal para ser consumidos de distintas formas, a la mantequilla y con epazote es la más popular de ellas. Pueden ser consumidos como plato fuerte o guarnición, y por su exquisitez, han sido denominados el caviar mexicano.
Escamoles. Foto: Culinaria Mexicana.
Hormigas chicatanas
Son hormigas voladoras, de color rojizo y cuerpo alargado. Emergen de sus nidos durante la época de lluvias, en junio, julio y agosto en Oaxaca, Puebla, Chiapas, Veracruz e Hidalgo. Su captura resulta complicada, pues hay que esperar a que salgan de su nido. Una vez fuera de la tierra se pueden atrapar fácilmente, ya que al ser voladoras, caminan lentamente; sin embargo, su mordida puede ser bastante molesta.
La forma más tradicional de prepararlas es en salsas, aunque también es común encontrarlas en moles y tamales. Su sabor es fuerte y tiene notas ahumadas.
Jumiles
Estas chinches de poco menos de un centímetro de tamaño, son originarias del Cerro del Huixteco, cercano a Taxco, Guerrero. También se conocen como chinches de monte. Su captura es complicada, ya que al sentirse agredidas, expiden un olor fétido o vuelan en conjunto.
Tienen un característico sabor a canela que proviene de los tallos y hojas de los encinos de los cuales se alimentan. Se consumen vivos, tostados o fritos, acompañados con salsa de jitomate asado o guacamole.
Jumiles. Foto: Culinaria Mexicana.