El ruibarbo es un producto vegetal originario de Asia. Por su alta cantidad de ácido oxálico, se recomienda consumir las ramas o peciolos, que suelen presentar un tono verde y rojizo cuando están en su punto.
Procedimiento
Pasta Sucrée
Mezcle en la batidora, con el aditamento de pala, la mantequilla, el azúcar glass y la sal. Agregue el huevo y la almendra en polvo y bata nuevamente hasta obtener una consistencia cremosa. Incorpore la harina de trigo y mezcle hasta obtener una bola de masa, pero sin trabajarla demasiado. Coloque la pasta sobre plástico autoadherente, presiónela para obtener un disco, cúbrala con más plástico y refrigérela durante 2 horas.
Coloque un marco de 18 centímetros por lado sobre una charola con papel siliconado. Ponga la pasta sucrée dentro del marco y presiónela con las manos hasta que la masa cubra bien toda la base del cuadrado. Refrigérela durante 15 minutos.
Ruibarbo
Corte el ruibarbo en trozos de 16 centímetros de largo. Ponga sobre el fuego el agua con el azúcar; cuando hierva y se haya formado un jarabe, agregue los trozos de ruibarbo y cuézalos durante 3 minutos. Sáquelos del jarabe y cuélelos. Deje hervir el jarabe hasta que se reduzca a la mitad.
Crema de pistache
Mezcle el pistache en polvo con la almendra en polvo, el azúcar y la sal. Incorpore el huevo y después la mantequilla derretida.
Precaliente el horno a 180 °C. Extienda la crema de pistache sobre la pasta sucrée y distribuya encima los trozos de ruibarbo, formando dos capas sobrepuestas. Hornee la tarta a 180 °C durante 25 minutos. Deje que se entibie. Barnice la tarta con el jarabe de ruibarbo.
Decore si lo desea con un poco de azúcar glass y pistaches troceados.
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