La chef Alicia Gironella De’Angeli fue una de las figuras más importantes de la gastronomía mexicana. Su vocación culinaria surgió en el seno familiar gracias a las visitas a mercados que hacía con su madre, abuela y nana. Su ferviente interés por conservar y promover la gastronomía mexicana la llevó a fundar diversos programas, como el Instituto de Cultura Gastronómica y el primer Diplomado para Chefs en la Universidad Iberoamericana.
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Fue directora y fundadora del Tajín, asimismo colaboró con la fundación del Conservatorio de la Cultura Gastronómica Mexicana y representó el Movimiento Slow Food en el país. Junto con su esposo Giorgio De’Angeli, conocido como el caballero defensor de la cocina mexicana, escribió diversas obras entre las que se encuentran el Gran libro de la Cocina Mexicana y el Larousse de la Cocina Mexicana.
Su creatividad y su inquietud la llevaron a crear platillos como el famoso Mole de novia o la entrañable ensalada Avándaro. Su legado continuó con la educación, pues fue importante para la educación de diversos chefs, como el chef Gerardo Vázquez Lugo del restaurante Nicos y posicionado como uno de los mejores de Latinoamérica por los 50 Best Restaurants o la chef Margarita Carillo, coordinadora de vinculación gastronómica del CCGM y de autora de Tamales y Atoles Mexicanos . Asimismo, construyó todo un legado para que la cocina mexicana fuera reflexionada, registrada y preservada a través de sus recetas.
Por Miguel Guzmán
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