El pescado es un alimento que aporta una serie de nutrientes esenciales que pueden marcar una diferencia positiva en la salud en general. Es fuente de proteína de alta calidad y ácidos grasos como Omega-3 que ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardiacas.
En comparación con las carnes rojas y procesadas, el pescado es más bajo en grasas saturadas y calorías, lo cual lo convierten en una alternativa saludable que puede ayudar en el control de peso y en la prevención de enfermedades crónico-degenerativas asociadas a la alimentación, como la obesidad y diabetes.
Incluir el pescado en tu dieta es una elección inteligente para mejorar la nutrición y promover la salud a largo plazo. Aquí te dejamos algunas ideas deliciosas ideas para que lo prepares en casa.
1. Pescado frito
El pescado frito es una de las maneras más comunes de consumir este alimento en México, sobre todo en la temporada de cuaresma. Ya sea de agua dulce o salada, basta con añadir un poco de sal y pimienta antes de colocarlo en el aceite caliente para poder disfrutarlo en unos cuantos minutos.
Existen muchas variantes de técnicas e ingredientes que puedes utilizar para modificar el sabor y textura del pescado frito. Por ejemplo, freírlo entero con piel te permitirá añadir una textura crocante en el exterior sin que se seque. Un ejemplo es esta receta de pescado frito del chef Ricardo Muñoz Zurita.
Pescado frito. Receta del chef Ricardo Muñoz Zurita. Fuente: Archivo fotográfico de Larousse Cocina.
Empanizar y rebozar el pescado antes de freírlo también te permitirá añadir otro nivel de textura y sabor al pescado. Aquí un video de las técnicas explicadas paso a paso para que las realices en casa como un experto.
2. Croqueta de pescado
Después del pescado frito, las croquetas de pescado son la segunda forma más popular de aprovechar este ingrediente. Son una opción deliciosa que puedes disfrutar como aperitivo o plato principal, y que te permitirá sacarles el máximo provecho a los restos de pescado de preparaciones anteriores. Además de esto, es uno de los platillos consentidos por los niños.
Para prepararlas basta con mezclar el pescado cocido y desmenuzado con puré de papas, hierbas y especias. Luego da forma a las croquetas, pásalas por huevo batido y pan rallado y fríelas hasta que estén doradas. Aquí la receta.
Croqueta de pescado. Fuente: Archivo fotográfico de Larousse Cocina.
3. Papillote o empapelado
Papillote es un término utilizado para nombrar a la técnica de cocción con envoltorios de papel sulfurizado o aluminio. El papel se engrasa con mantequilla o aceite y luego, una vez lleno, se dobla plegando al borde como un dobladillo, de modo que se obtenga un envoltorio bien firme.
Este envoltorio o papillote se hincha con el calor del horno, lo cual permite la cocción de los alimentos sin que pierdan humedad. Esta es, justamente, la razón principal por la que el papillote es una de las técnicas favoritas para cocinar pescados y mariscos. En México, la técnica se conoce con el nombre de “empapelado”.
¿Te quedaste con ganas de prepararlo? Te invitamos a probar esta receta de Merluza empapelada con mayonesa de jitomate que sin duda se convertirá en una de tus favoritas.
4. Caldos y sopas con pescado
Los caldos y sopas son otras preparaciones con las que puedes sacar el máximo provecho a los retazos de pescado. El caldo o fondo de pescado es una receta básica con la que puedes elaborar muchas preparaciones, como el Arroz pilaf o pulau tradicional de la cocina de Oriente Medio o el Pescado al vapor de hierbas verdes de la chef Alicia Gironella.
Con el caldo de pescado puedes preparar también la famosa Salsa de vino blanco, receta clásica francesa con la que puedes acompañar innumerables preparaciones elaboradas con pescados y mariscos.
Caldo de pescado. Fuente: Archivo fotográfico de Larousse Cocina.
5. Mextlapique
Del náhuatl michin, pescado, y tlapictli, envuelto en hojas de maíz. El mextlapique es una especie de tamal sin masa, relleno de pescados de talla pequeña como los mextlapiques (que le dan su nombre), charales, pescados blancos, chucumites u otros productos como ancas de rana, renacuajos mezclados con rajas de chile, nopales, cebolla y alguna hierba o condimento como epazote. El tamal se envuelve en hojas de maíz y luego se pone sobre el comal, volteándolo constantemente para que se cueza por completo. Las hojas exteriores de los mextlapiques suelen quedar quemadas o, al menos, muy chamuscadas, pero el relleno queda intacto y con un delicioso sabor ahumado.
Los mextlapiques son típicos de la zona lacustre de los valles de México y Toluca, aunque también se les puede encontrar en los mercados de la Ciudad de México. ¿Se te antojó? El chef Gerardo Vázquez Lugo nos enseña a preparar un delicioso Mextlapique de trucha.
¿Cuál es tu manera favorita de preparar el pescado? Déjanos tu respuesta en los comentarios.
Por Ana Gabriela de la Rosa
Cargando…
