El garibaldi es un pan dulce que forma parte de la panadería tradicional de la Ciudad de México. La receta fue creada por Giovanni Laposse, panadero italiano que emigraría a México a sus 21 años, trayendo consigo su gusto por la panadería y sus técnicas italianas.
El chef Éric Kayser elabora su propia versión y nos enseña a prepararla en su último libro Larousse del pan.
Procedimiento
Garibaldis
Ponga en el tazón el azúcar y la mantequilla, mezcle a velocidad baja con el aditamento de pala. Aumente poco a poco la velocidad conforme ambos ingredientes se integren hasta obtener una mezcla suave y lisa.
Despegue la mezcla de las paredes del tazón con una espátula, agregue el yogur natural y mezcle a velocidad media, hasta integrar.
Añada los huevos, uno por uno, asegurándose que cada uno quede integrado antes de añadir el siguiente, y continúe mezclando la masa.
Cierna la harina, el polvo para hornear y el bicarbonato de sodio e integre en el batido a velocidad media. Añada la sal, el extracto de vainilla y el jugo de naranja y trabaje hasta obtener una preparación tersa y homogénea. Coloque el batido en una manga pastelera.
Precaliente el horno a 170 °C durante 15 minutos.
Engrase con mantequilla y enharine las cavidades de un molde para mantecadas y rellene cada una con el batido a ¾ partes de su capacidad.
Coloque el molde sobre una charola para hornear y cúbralo con papel siliconado para obtener mejores resultados. Reduzca la temperatura del horno a 160 °C y hornee los bizcochos durante 30 minutos.
Luego de sacar los bizcochos del horno, déjelos enfriar y desmóldelos con cuidado. Colóquelos sobre una rejilla.
Decorado
Mezcle la mermelada de chabacano con la cantidad necesaria de agua hasta obtener una preparación fl uida y casi líquida. Coloque
la preparación en un recipiente profundo y ponga las grageas en otro recipiente. Con un tenedor, sumerja los bizcochos en la mermelada de chabacano ligera y escúrralos para retirar el exceso de mermelada.
Ponga el bizcocho bañado en el recipiente de
las grageas y con ayuda de dos tenedores espolvoréelas encima del bizcocho hasta cubrir por completo