El vino tinto es una bebida apreciada en todo el mundo por su complejidad y la gran variedad de sabores y aromas que nos ofrece, pero también por la amplia gama de estilos que existen alrededor del mundo. En esta nota, exploraremos los diversos tipos de vino tinto, desde las variedades más comunes hasta las opciones más peculiares, con el objetivo de brindar una visión completa para los amantes del vino y aquellos que deseen ampliar su conocimiento sobre esta bebida milenaria.
¿Qué hace que un vino sea tinto?
Antes de adentrarnos en las variedades de vino tinto, tenemos que comprender la razón por la que existen vinos tintos, vinos blancos y vinos rosados y por qué la mayor parte del vino que se consume en el mundo es tinto. El color del vino lo aportan las pieles de las uvas y, aunque también existen las uvas verdes, con las que se producen principalmente vinos blancos y espumosos, la mayoría de las uvas tienen tonalidades rojizas o púrpura que son producidas por polifenoles.
El contacto del jugo extraído de las uvas con sus pieles torna el jugo de un color en particular, dependiendo de la variedad de uva con la que se está trabajando. Los productores juegan con las proporciones jugo-piel, así como el tiempo de maceración para alcanzar el color que buscan para su producto final. Por otro lado, los polifenoles también son responsables de la tanicidad del vino, es decir, la sensación de ardor, calor o astringencia generada por los taninos contenidos en el vino.
Los vinos blancos se elaboran con muy poco (o nulo) contacto del jugo de las uvas con sus pieles; mientras que los vinos rosados se maceran durante cortos periodos, o bien, con pequeñas porciones de uvas rojas en su mezcla, reduciendo al mínimo la coloración del producto final. Sabiendo esto, exploremos algunos de los vinos tintos más populares.
Cabernet Sauvignon
Originario de Burdeos, Francia, pero adaptado prácticamente en todas las regiones productoras del mundo, el Cabernet Sauvignon es conocido por sus sabores intensos y su cuerpo robusto. Es un vino tinto seco con notas de grosella negra, ciruela y pimiento verde que marida a la perfección con platos a base de carne de res, cordero, embutidos asados y queso parmesano.
La gran escala de producción de Cabernet Sauvignon permite a los productores ofrecer vinos bastante decentes por precios accesibles. Busca vinos de Burdeos, el Valle de Napa, Argentina, Chile y Australia.
Merlot
Suave y afrutado, el Merlot es otro vino tinto popular que se cultiva en todo el mundo. Con notas de cereza, mora y chocolate, es una opción versátil que marida bien con una variedad de platos a base de pollo o cerdo, estofados de res y, por supuesto, cordero.
Debido a que su cultivo, en comparación con otras variedades, es sencillo y a su rápida maduración, se produce en muchas regiones de Europa y el Nuevo Mundo. Aunque su popularidad ha bajado y ahora es complicado encontrar vinos 100% Merlot, esta variedad está presente en mezclas de uvas de grandes vinos franceses e italianos.
Pinot Noir
Originario de la región de Borgoña, Francia, el Pinot Noir es conocido por su delicadeza y elegancia. Con aromas de frutas rojas, tierra húmeda y especias, este vino tinto es ideal para quienes prefieren sabores más sutiles que los que ofrecen el Cabernet y el Merlot. Acompaña a la perfección platos a base de aves como el pavo y pescados como el salmón y el bacalao.
Se cultiva principalmente en Francia y Alemania en Europa, en California y Baja California en Norteamérica y en Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Chile, en el hemisferio sur. Los mejores Pinots son reconocidos por su elegancia, delicadeza y dinamismo.
Syrah o Shiraz
Conocido como Syrah en Francia y Shiraz en Australia, este vino tinto es audaz y especiado, con notas de mora, pimienta negra y cuero que van perfecto con cortes de carne, piezas de cerdo, papas y vegetales asados (piensa en unos espárragos o coles de bruselas en el asador).
Es especialmente popular en regiones como el Valle del Ródano, en Francia y Barossa Valley, en Australia; aunque también se produce en California, Sudáfrica y, por supuesto, México.
Nebbiolo
Nebbiolo es la variedad tinta más fragante, es elegante y estructurado, y de acidez y tanicidad elevadas que lo hacen sentir con mucho más edad de la que realmente tiene. Se originó cerca de la ciudad de Alba, en el Piamonte italiano, región famosa por sus trufas blancas. Combina a la perfección con cremas y sopas de vegetales, estofados y, en general, cualquier plato reconfortante.
Barolo y Barbaresco son dos denominaciones de origen en Italia que se producen con estas uvas, pero son vinos con precios sumamente altos que se compran para guardar por veinte, treinta o cincuenta años. Mientras eso pasa, puedes disfrutar esta variedad en vinos sin denominación de origen de Italia, California e, incluso, México.
Malbec
Esta uva es nativa del sudoeste de Francia aunque en la actualidad se le asocia con Argentina, en donde se expresa con más fruta y colores más oscuros. Es un extraordinario vino para maridar con cortes, sin mencionar que suele ser bastante accesible hasta en gamas altas. Busca vinos de Cahors si quieres vivir la experiencia del Malbec francés y de Mendoza para conocer el lado argentino de la historia. Por supuesto, también puedes encontrar Malbec mexicano.
Cabernet Franc
Para aquellos que buscan sabores especiados y diferentes en el vino, Cabernet Franc ofrece vinos de muchísimo carácter que suelen utilizarse en mezclas, para añadir ese toque especiado que le falta al Merlot o para agregarle la frescura de ingredientes como pimientos al vino. Lo encuentras desde España hasta Italia, pasando obviamente por Francia.
Grenache o garnacha
Protagonista en algunos de los vinos tintos multivarietales más famosos de Francia, el Grenache es también una de las variedades más queridas por la industria del vino en España, en donde lo conocen como garnacha. Va muy bien con platos que contengan elementos grasosos, como quesos, carne o foie gras.
Vino tinto espumoso
Hasta ahora, hemos hablado de vinos tranquilos, es decir, los que no tienen burbujas; y es que a mucha gente todavía le sorprende escuchar que existen los vinos tintos espumosos.
En Italia existe una gran tradición de hacer espumosos excelentes vinos tintos, como es el caso del Lambrusco, del cual existen etiquetas de una calidad infinitamente superior a las que se encuentran en las tiendas de conveniencia, y el Brachetto d’Acqui, un vino tinto espumoso con un dulzor y efervescencia muy equilibrados.
Desde los clásicos Cabernet Sauvignon y Merlot hasta opciones más difíciles de conseguir como el Lambrusco italiano, el mundo del vino tinto ofrece una amplia variedad de sabores y estilos para explorar. Ya sea que prefieras vinos robustos y complejos u opciones más suaves y afrutadas, hay un vino tinto adecuado para cada ocasión y gusto. Explora estas variedades y descubre tus favoritas para disfrutar en compañía de una buena comida o simplemente para relajarte al final del día.
Por Gonzalo G. Ehnis
Fuentes consultadas:
Sohm, Aldo, Wine Simple, Potter, pp. 64 – 73.